22/2/20

Una mosca en la sopa.




Es muy posible que el futuro menú, (de los pobres por supuesto), esté hecho a base de subproductos procesados tecnológicamente, es decir toda la basura, desechos y animales que hoy nos repugnan, de los que se pueda extraer por medio de la tecnología una fuente barata de sustento.

Tenemos por ejemplo el caso de una harina fabricada a base de larvas de mosca que es utilizada en alimentación animal, pero que poco a poco se va mostrando en los médios de manipulación masiva a modo de tanteo y de primer paso para su aceptación general.

Nos tratan como a animales de granja, para ellos es lo que somos, solo importa que produzcamos y para eso buscan la forma de tenernos alimentados del modo más barato posible. Permitirles que lo lleven a cabo, es cuestión nuestra.


Puré de moscas para pan y bases de pizza

La legislación europea abre la puerta para que la harina procesada que investigadores de la UA obtienen de las larvas de dípteros se destine también al consumo humano

Los investigadores trabajan solo con algunas decenas de especies de moscas domesticadas. 
 
 
Sin colesterol, económicas y sin problemas de abastecimiento. Que las personas empecemos a comer moscas está a la vuelta de la esquina, y una de las empresas del parque científico de la Universidad de Alicante, Bioflytech, se encuentra en la primera línea de salida para liderar el mercado de producción con la cría de estos insectos.
Gracias a la tecnología punta que han desarrollado, abastecen ya de toneladas de harina procesada de la larva de mosca, convertida en piensos para alimentar al ganado y las mascotas .
El coordinador del grupo investigador, Santos Rojo, apunta que la normativa europea acaba de abrir la puerta para que los insectos puedan llegar a la alimentación humana.
Aunque de momento solo existe una lista muy restrictiva de animales que, por ley, pueden ser alimentados con harina de insecto, producción en la que esta empresa alicantina de base tecnológica ya está versada después de cinco años de evolución en el mercado, «la puerta está abierta», concreta el director del proyecto.
Santos Rojo opina que el paso que sea apto para el consumo humano está dado «desde el momento en que ya llega a la alimentación animal, porque los controles de Sanidad que se aplican a lo que comen los animales, que luego nos comemos las personas, son mucho más estrictos que los que rigen para lo que comemos nosotros», apunta el científico.
Bastará, por tanto, que se especifique en la ley que la harina de insecto puede formar parte de las proteínas que ingiere la población directamente, ya que actualmente los piensos que alimentan al ganado ya incluyen estas harinas procesadas.
Y para cuando llegue ese momento que estos investigadores no ven muy lejano, la spin-off de la UA, Bioflytech, dispone de la tecnología necesaria para una producción masiva de larvas de mosca, base de la alimentación de un futuro próximo a base de insectos. «Hemos conseguido romper los cuellos de botella tecnológicos para una producción masiva a un precio razonable», aseguran.

Sin colesterol
Las harinas procesadas de mosca se integrarían en el pan o en las pizzas, por poner un ejemplo, con la aportación añadida de que la carne de insecto, como precisan los científicos, no tiene colesterol.
La ventaja de esta spin-off reside en que cuenta con el know-how que permite una producción a escala industrial de la incipiente industria "micro-ganadera" en la que ya está inmersa desde hace cinco años.
«La legislación europea está casi lista para su aplicación a gran escala. Esperemos que España no pierda esta oportunidad y que podamos contribuir al desarrollo industrial del país», subraya Rojo.
Actualmente producen en las naves unos 2.000 kilos al mes de biomasa de larvas de mosca, y el mercado de fabricantes de piensos moviliza unos 5.000 millones de euros al año.
Para estos científicos, su actual producción es solo un juego para lo que puede llegar a ser. «Con una inversión adecuada podemos colocarnos como referente en el sector de la innovación», sostienen.
Y es que esta vertiente de la alimentación humana es solo una de las líneas de investigación de este equipo de investigación multidisciplinar de Ciencias Ambientales en la Universidad de Alicante, que lidera Santos Rojo e integran además Celeste Pérez y Anabel Martínez, junto a Berta Pastor, el técnico Javier Espero, y los becarios Andrés Campoy, Lidia Sáez, Daniel Aznar, Andrea Aracil y Patricia Rubio.

Polinizadoras
A la producción de biomasa larvaria, la investigación de esta empresa de base tecnológica suma el empleo de otras especies de moscas en su función de polinizadoras.
«La variedad existente de moscas es enorme, nosotros solo nos dedicamos a unas decenas en las que centramos el trabajo porque hay que domesticarlas», apunta Rojo.
Con las polinizadoras, -que curiosamente tienen un aspecto muy similar al de un abejorro, con un tono incluso anaranjado y distinto al de otras moscas-, los investigadores consiguen contrarrestan la actual crisis mundial de abejas.
La población de los insectos polinizaremos por excelencia está mermando de modo significativo «y aunque no lleguen a desaparecer del todo las abejas, porque eso sería una hecatombre mundial, nuestros polinizaremos -son moscas macho- actúan de un modo complementario», puntualiza el investigador.
Para polinizar plantas y para el control de plagas también. «La empresa universitaria ya produce 400.000 polinizadores al mes -moscas específicamente destinadas a esto- y aspira a cubrir el equivalente a una producción que suponga hasta un millón de euros del conjunto de un sector que genera 153.000 millones al año.

Soluciones
«Aportamos soluciones desde la biotecnología para los productos y procedimientos que desarrollamos, relacionados con la cría artificial de insectos, y sumamos el reto del uso de la tecnología para devolver a la sociedad la investigación entomológica aplicada se». La I+D del grupo se dirige a la alimentación animal, la agricultura y biodegradación de residuos, y la biotecnología y el sector energético cerrando el círculo.
Y es que el modo de hacer de Bioflytech imita a la naturaleza. Como describe Santos Rojo «seguimos el ciclo de los propios insectos», susceptibles de ser transformados en residuos orgánicos del ámbito industrial, para obtener «un producto final de valor añadido».


 https://www.diarioinformacion.com/alicante/2017/06/04/pure-moscas-pan-bases-pizza/1902191.html

6/2/20

Sionismo asesino que se presenta como víctima.

Copi-pega de aquí, que si no puede pensar alguien que esto solo es cosa mía.

 Yahvé es el padre, Israel es el hijo y Auschwitz el Espíritu Santo

Judíos ortodoxos empuñan la bandera palestina
En 1981 las calles de Líbano se vieron sacudidas por una ola de ataques terroristas de falsa bandera. El patrocinador de las mismas era Ariel Sharon, el ministro de Defensa israelí, que ordenó explotar coches bomba en los barrios palestinos de Beirut y otras ciudades libanesas.

Muchísimos civiles murieron. En octubre un único ataque causó 400 víctimas y sólo en diciembre se produjeron 18 explosiones. Una organización libanesa fantasma reivindicó aquellos atentados, cuyo objetivo era provocar a la OLP para que tomara represalias contra Israel, lo que serviría para justificar la invasión militar del país vecino.

La OLP no cayó en la trampa, por lo que Israel planificó un gigantesco ataque en el estadio de Beirut con ocasión de la ceremonia política del 1 de enero, con toneladas de explosivos, con la idea de causar muerte y destrucción a una escala sin precedentes, incluso para el Líbano.

Aquella ola culminó el 16 de septiembre de 1982 en la matanza de los campos de refugiados Sabra y Chatila, en la periferia de Beirut. Se prolongó durante unas 30 horas. Algunos recuentos empiezan por estimar en 460 el número de palestinos muertos, en su mayor parte niños y ancianos; otros llegan hasta los 6.000. Además hubo torturados, violados y despedazados.

Tras ser arrojados de su tierra en 1948, los palestinos han sido perseguidos y exterminados hasta el día de hoy por los sionistas, pero nadie habla de ello. Nadie utiliza las palabras “genocidio” u “holocausto” que quedan reservadas para los judíos.

“Holocausto” es un término que alude a un sacrificio ritual de animales encima de un altar. El animal se mata y después se come.

“Voy a borrar de la faz de la tierra a todos los hombres que he creado porque me arrepiento de haberlo hecho”, dice Yahvé en el Génesis (6:7). Para ello provocó un diluvio, aunque luego se arrepintió de la matanza que había cometido y, para calmar su ira, Noé cometió el primer “holocausto” que registra la historia.

Tras el “holocausto”, el dulce olor de la carne quemada tranquilizó a Yahvé, quien prometió no volver a cometer más masacres de seres humanos (Génesis 8:21).

Los sionistas eligieron un término religioso, como “holocausto”, para referirse a las víctimas del fascismo en la Segunda Guerra Mundial porque en Israel los asuntos importantes se denominan así. La matanza no es más que un símbolo y, aunque el significado es sagrado, no es el que se imaginan: Yahvé quedó complacido por ella porque abría el camino a la Tierra Prometida, el Reino de Dios en la tierra, o sea, el Estado de Israel.

Yahvé es el padre, Israel es el hijo y Auschwitz es el Espíritu Santo, escribió Abraham Herschel (1), uno de los principales rabinos del siglo pasado. No hay peor antisionista que un judío. Si los fiscales españoles leyeran un poco, por ejemplo, lo que escriben los judíos contra Israel, los meterían a todos a la cárcel por “delito de odio” contra sí mismos. Es una bendición que sean tan ignorantes.

En 1977 Moshe Shonfeld, otro rabino ferozmente crítico, escribió que los sionistas necesitaban el “holocausto” para crear el Estado de Israel. Necesitaban víctimas, sangre, que es “el aceite que engrasa las ruedas del Estado nacional judío” (2).

Israel es un Estado vampírico. Nace de la sangre, vive de la sangre y nunca se sacia de sangre (tanto si les gusta a los fiscales españoles, como si no).


(1) Israel, An Echo of Eternity, https://books.google.com/books/about/Israel.html?id=4skRAQAAIAAJ
(2) The Holocaust Victims Accuse, https://www.truetorahjews.org/images/holocaustvictims.pdf