Los integristas
políticos son como los religiosos, te exigen que te definas y que aceptes una
"verdad", un líder, un programa... no pueden aceptar que no tengas un dios, que no
tengas un ídolo.
Solo respetan a un adversario ideológico aunque lo odien por sus
ideas. A los que no aceptan a un dios, aunque sea el contrario, o a un líder o partido aunque sea el enemigo, lo detestan. ¿Como van a saber porqué
tienen que odiarlo y como osa tener ideas propias?. Hay que seguir a alguien,
alguien tiene que pensar por ti.
De esta manera las ovejas siempre estarán controladas en el establo.
ResponderEliminarSalud!
Y condenadas a ser ovejas, por ellas mismas.
EliminarSalud!
Hombre, los perritos necesitan rebatirte atacándote con alguna falacia fácil, y para eso te tienen que meter primero en un grupo del que se sepan un repertorio de insultos.
ResponderEliminarSi, la fuerza del grupo también influye... en los débiles.
EliminarPara los medios de comunicación es muy fácil atacar a los integrismos asimilandolos con radicalismos y potenciarlos a la vez. Curioso. Según los media antifa y salafistas son lo mismo, moros y cristianos, rusos y americanos. En cambio el fascismo no es radical. Lo único igual en todas las partes del mundo es el capitalismo.
ResponderEliminarSalud!
Capitalismo solo es la cara actual, su fin no terminaría con el problema, que es más antiguo.
EliminarPor supuesto, los esbirros de los integristas y los propios integristas, no se ven a sí mismos como tales; Los malos son los otros.
Salud!