En aquel entonces, rendido el ejercito y el estado a un poder militar muy superior, el pueblo, lejos de resignarse, se levantó contra el invasor y hombres, mujeres y niños murieron luchando contra el cruel enemigo.
Hoy, a pocas generaciones de aquellos héroes que murieron luchando por la libertad, (no por un rey ni por una bandera), los hombres matan a sus hijos, tras permitir que asesinen a sus padres y se dejan envenenar, antes que hacer frente a un enemigo desarmado.
Esta vez el miedo ha vencido a un pueblo cobarde y desonroso, pero no el miedo a la lucha, el sufrimiento y la muerte que igualmente han llegado y se apoderarán de todos, sino el miedo a perder las comodidades por las que otros han luchado.
Los que nunca morirán:
Los que nunca han vivido:
El pueblo como un todo ya no existe. La lucha social el sistema desde la izquierda postmoderna institucionalizada o idiotizada o ladrona hasta su hermana gemela la derecha la ha troceado en pequeñas luchas insustanciales, vacuas, líquidas para controlar mejor a la sociedad. Una sociedad destruida sin capacidad de lucha pero sí de obediencia. La revolución social que es algo que nos debería unir a las capas subyugadas la han sustituido por las cuestiones de género y no sé qué más mierdas liberales para mantener el dominio del privilegio y este modo de vida esclavo. Y no hace falta irse tan lejos ya en los años 30 del siglo XX había más conciencia de clase que ahora. Ahora lo que hay es un viva al rebaño, al sometimiento y a esta decadencia mental abominable... En fin seguiremos picando piedra y predicando en el desierto porque me niego a claudicar ante la barbarie en la que vivimos.
ResponderEliminarSalud!
No, rendirse nunca. Podremos ser pocos, pero estamos del lado de la verdad.
EliminarSalud!